La epicondilitis lateral un padecimiento muy común entre los jugadores de pádel
La epicondilitis lateral: Este padecimiento es una enfermedad que se caracteriza por un dolor agudo en el codo, el dolor se extiende en el hueso que se siente externamente, al tacto es muy doloroso. El codo es compuesto de dos huesos, los cuales son:
1- Humero
2- Cúbito
Así que el hueso que sobresale en el codo se denomina epicóndilos, donde se conectan varios músculos por medio de unos tendones, esta parte es llamada epicóndilo lateral, así que la epicondilitis lateral también se le puede llamar tendinitis del extensor de la muñeca.
¿Qué es lo que sucede para que se dañe?
Uno de los principales movimientos que produce el codo de tenista, es cuando un jugador utiliza repetidas veces el musculo que actúa en levantar la muñeca y la mano, de esta forma los músculos son estirados y los tendones al estar en continuo trabajo y estiramiento el punto donde se conecta los músculos y los huesos el cual es el epicóndilo lateral, da como resultado una inflamación de los tendones.
La inflamación del tendón hace que ocurran pequeños desgarres, lo que es importante en esta etapa es que se debe de sentir o no se debe de dejar pasar esta dolencia al principio, para que no haya ningún efecto permanente.
Existen otros oficios y trabajos que producen esta enfermedad y pueden ser los siguientes:
1- Albañil
2- Tejer
3- Mecanografía
Existen muchos otros pero estos pueden ser los más comunes para que ocurra una inflamación de los tendones. Los síntomas que produce un efecto de estos, los cuales pueden ser tratados a tiempo y mejorar con un tratamiento antes de que ocurre peores cosas.
Los síntomas comunes de este padecimiento son los siguientes:
1- Dolor de codo en la parte puntiaguda externa.
2- Dolor al levantar el brazo o la muñeca y la mano
3- Dolor agudo al levantar un peso con la mano
4- Dolor al cerrar el puño
Tratamiento
El tratamiento de esta enfermedad puede realizarse de la siguiente manera:
1- Hielo: Utiliza hielo para el codo, sumerja el codo en hielo durante 30 minutos cuatro veces al día, durante cuatro días o hasta que los síntomas se hayan ido.
2- Masaje con hielo: Utiliza un vaso de espuma y congela el agua, luego al estar congelado, corta la mitad del baso, exponiendo una parte del hielo y frota la parte afectada haciendo un movimiento en círculos.